En trabajos anteriores Haruki
Murakami se interesó por los distintos realismos, entre ellos el ralismo mágico
presente en Kafka en la orilla. En
esta oportunidad, Después del terremoto,
Haruki muestra una secuencia de historias concatenadas por el triste episodio
de un terremoto, acontecimiento realmente acaecido en Kobe en 1995, sugiere el
FIN DEL MUNDO. ¿Cómo es este final? La respuesta el autor de Tokio Blues la
encuentra entre la religión y el baseball. Hay en la novela ciertos guiños
explícitos a la música, esto Murakami no lo ha perdido. A decir verdad lo más
atrapante de la novela es “la rana que salva al mundo”, en esta instancia, se
enviste el realismo haciéndolo un apartado de la imaginación. Katagiri ayuda a la
rana a rescatar el mundo generando una escisión en su interior y fuera de él
entre la luz y la oscuridad.
Recomiendo la lectura atenta de
esta asombrosa historia DE FICCIÓN.
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